El Libro Blanco de la profesión docente

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Para seros sinceros, antes de realizar esta actividad, ni si quiera sabía de la existencia de un Libro Blanco de la enseñanza que estuviese dirigido a la mejora de las condiciones de la profesión de los docentes. De modo que, para los que aún no lo conozcan como yo anteriormente, un Libro Blanco consiste en un documento oficial cuya función es elaborar un informe sobre un tema específico, el cual trata los principales problemas que lo constituyen para así poder dar o proponer una solución a cada uno de los anteriores. Para que lo entendáis mejor, no es otra cosa que una especie de guía que podemos consultar cuando queremos encontrar respuesta a una serie de problemas y a la que todos podemos tener acceso.

Tras la lectura de varias de las medidas que este Libro Blanco de la profesión docente propone, ideas distintas han pasado por mi cabeza. Algunas muy esperanzadoras y optimistas y otras bastante menos.

Todas y cada una de las propuestas redactadas en el libro merecen ser leídas con detalle y examinadas, pues creo cada una de ellas es interesante a su manera y propone medidas hacía la profesión docente bastante innovadoras. Tales como la propuesta número 12, orientada hacia la mejora de los departamentos de psicología y pedagogía y cuya misión estaría enfocada hacía la salud de los alumnos y la mejora de su orientación tanto en el sistema educativo como fuera de él. Sin embargo, como la propia introducción del Libro Blanco afirma, una cosa es la realidad y otra es el deseo, y muchas veces debemos saber diferenciarlos y optar por la parte más realista.

Mi sensación a medida que escribo entradas en este blog es que cada vez crecen más y más las propuestas educativas, pero lo que no crece o se desarrolla paralelamente a ellas es la parte esencial: su puesta en práctica. Y la mayoría de las ocasiones, detrás de esta “no puesta en escena” se encuentran una serie de disidencias políticas y una diferencia de opiniones que impiden que finalmente muchas de estas propuestas que han sido largamente consensuadas y que esconden un esfuerzo de reflexión y crítica inmenso detrás, finalmente no vean la luz, como tantas otras cosas.

Y vosotros… ¿Qué pensáis?